Con peluca negra rizada y un mostacho, la diputada Salma Luévano (Morena) se caracterizó como el panista Gabriel Quadri, de quien exigió su desafuero por el discurso de odio contra la comunidad LGBTI.
Luévano, quien preside la Comisión de Diversidad de la Cámara de Diputados se rapó el pasado 10 de enero, en protesta por las declaraciones transfóbicas por parte del legislador del blanquiazul, quien cinco días después fue expulsado de un programa de televisión, porque el conductor consideró que seguía con sus ataques contra la comunidad trans.
Este martes, en conferencia de prensa, Luévano exigió que el PAN se haga cargo de sancionar a sus legisladores agresores, que son “reprimidos sexuales”.
Presente en la conferencia, Gloria Davenport, coordinadora nacional del Movimiento Feminista de Mujeres Diversas, dijo que en efecto el blanquiazul tiene que hacerse cargo de sancionar “a sus violentadores”.
Además, consideró que se le debe dar seguimiento a las denuncias que presentaron alumnas de Quadri, de preguntas agresiones sexuales. “El PAN tiene que responder, ponerles freno”, declaró.
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