Organizaciones no gubernamentales de México y Estados Unidos anunciaron la realización de un proceso de consultas y foros con el fin de encontrar acciones que mitiguen los efectos de la desigualdad, violencia y crisis migratoria.
Se trata, dijeron, de una serie de acciones binacionales para impulsar la justicia social, los derechos humanos y la igualdad en la vida democrática y en las relaciones de México y Estados Unidos.
En conferencia de prensa, detallaron que en esta acción participan mujeres, comunidades indígenas, nativo-americanas, afroamericanas y organizaciones de derechos humanos y justicia.
Señalaron que esta serie de consultas, foros, y encuestas culminará en su primera etapa con la celebración de una Cumbre por la Paz en la Ciudad de México el 27 de febrero del 2023.
“Ahí se presentarán los resultados de sus trabajos y promoverán una serie de acciones binacionales para impulsar la justicia social, los derechos humanos y la igualdad en la vida democrática y en las relaciones de México y Estados Unidos”.
En esta acción participan más de 40 organizaciones de México y Estados Unidos, como Global Exchange, Black Lives Matter y Espacio Migrante, Instituto Para las Mujeres en la Migración, las madres y padres de Ayotzinapa, entre otros.
Dijeron que de acuerdo con cifras oficiales y con las investigaciones de algunas de estas organizaciones, la compra de armas en Estados Unidos y la violencia armada en México y Estados Unidos alcanzaron el nivel más alto de la historia, en ambos países durante la pandemia.
“El 70 por ciento de las armas recuperadas en escenas de crimen en México vienen de Estados Unidos”, dijeron y advirtieron que se han registrado más de 10 mil eventos de violencia contra migrantes por parte de autoridades en ambos países desde la implementación del Programa Quédate en México.
Asimismo, destacaron que más de un millón 200 mil personas murieron a causa del COVID-19 en México y Estados Unidos, muchas de ellas personas latinas y afroamericanas. Mientras que más de 190 millones de pobres, mayoritariamente personas latinas, afroamericanas, indígenas y nativoamericanas, se encuentran en condiciones de vulnerabilidad en estos países.
“Los recursos y las capacidades de las comunidades más pobres y sus organizaciones no son suficientes para enfrentar estos problemas regionales y globales y dar pasos hacia la transformación de los sistemas que mantienen esta situación”, dijeron.
Por ello, agregaron, es importante dialogar entre pueblos, comunidades y organizaciones para tomar acciones regionales contundentes que señalen la ruta hacia una realidad y una relación distinta entre México y Estados Unidos. La que tenemos no sirve para recuperar la paz y avanzar en la justicia”, dijo Marco Castillo, Co-Director de Global Exchange.
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