17 de enero de 2025
Estambul vive una tragedia por la distribución de alcohol adulterado que ha dejado 37 muertos desde el lunes, mientras otras 27 personas permanecen en cuidados intensivos, algunas conectadas a respiradores. En total, 88 personas han requerido atención médica esta semana tras consumir bebidas producidas ilegalmente con metanol, un compuesto altamente tóxico, según reportan medios locales.
La Policía turca detuvo a 15 personas relacionadas con la fabricación y venta del alcohol contaminado, de las cuales cuatro ya fueron encarceladas bajo cargos de homicidio intencional. Las primeras investigaciones señalan que el producto adulterado fue vendido en un establecimiento gestionado por ciudadanos turkmenos en Estambul, informa la cadena NTV.
Además del impacto en la salud, las autoridades han intensificado operativos contra la producción ilícita de alcohol. Este año, ya se han decomisado 29 toneladas de bebidas ilegales y clausurado 64 negocios vinculados a esta actividad, de acuerdo con la agencia Anadolu.
El aumento constante de los impuestos sobre las bebidas alcohólicas en Turquía, que busca desincentivar su consumo, ha encarecido productos como el aguardiente de anís (raki), cuyo precio supera los 27 euros por botella, con un 61% del costo derivado de impuestos. Ante esta situación, muchos optan por producir alcohol en casa, enfrentando los riesgos asociados al uso de metanol, que puede causar daños irreversibles como ceguera o muerte.
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