La historia de amor y el matrimonio entre la filántropa mexicana Hanna Jaff y el heredero al título de Barón Teynham, Henry Roper-Cruzon, llegó a su final después de 18 meses entre acusaciones de racismo y discriminación de miembros de la familia real británica dadas a conocer por la mexicana.
«Me maltrataban, me humillaban diario, como mexicana, como filántropa y como académica. Siempre tratando de hacerme sentir menos, para que ellos se sientan superior. Pero al final del día, ellos nunca trabajaron, no tienen estudios, no tienen nada… es como su manera de sentirse ellos, la gran cosa», reveló Hanna Jazmín Jaff Bosdet a una revista del espectáculo de circulación nacional.
La socialité confesó que, si bien al principio de la relación todo parecía marchar muy bien, los cambios más drásticos y el deterioro de esta se dio en cuanto la pareja se mudó a Londres y es que comentó que su ex marido buscó extorsionarla para pagar sus deudas.
«Ya los últimos meses, cuando estábamos en Inglaterra, haz de cuenta que yo estaba casada con mi suegra y mi suegro; era defenderme sola, fue muy difícil. Como que me di cuenta de que trabajan en conjunto, todo lo hacían juntos y me exigían pagar cosas que no me pertenecían; casi me decían que me había hecho el favor» dijo la mexicana durante la entrevista a la mencionada revista.
Así también declaró haber sido objeto de racismo por parte de los miembros de la familia real británica quienes en repetidas ocasiones le dijeron que los mexicanos merecían estar trabajando en el campo poniendo en alto la supuesta pureza de la sangre de la familia real británica.
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